
Comedor de la Vivienda de Mayores de Priego | Foto: G.A.
“Desconocemos si estas tres trabajadoras tienen la titulación y requisitos que se exigían en las bases de la bolsa de trabajo, pero incluso si es así, entendemos que estamos ante una falta de seriedad y de cumplimiento con el compromiso adquirido en el marco normativo y la falta de dotación de personal que recogen esas bases, y además se está jugando con las expectativas de trabajo de personas, desempleadas y mayoritariamente vecinas de Priego”, critica el representante de Comisiones Obreras.
Tras haber contrastado los hechos, haber consultado la legislación vigente, y habiendo contactado con algunas de las personas que se están viendo afectadas por esta situación de parálisis institucional, desde CCOO han querido “manifestar públicamente su preocupación y denuncia”, haciendo un llamamiento a la Alcaldía para que “concluya el proceso de contratación”.
¿Cómo se ha llegado a esta situación?
Las monjas que gestionaban la Vivienda de Mayores se marcharon a primeros de diciembre de 2016. La Alcaldía, que esperaba que su salida se produjera unas semanas más tarde, valoró en un primer momento la posibilidad de traer un nuevo grupo de religiosas, pero fue advertida de que esa opción no era legal. Así pues, a finales de noviembre hubo que crear rápidamente una bolsa pública de empleo para que cualquier ciudadano pudiera aspirar a trabajar en la vivienda.
Sin embargo, dada la antelación con la que marcharon las monjas, el Ayuntamiento se vio en la necesidad de contratar a tres personas de manera provisional hasta que terminara la tramitación de la bolsa de empleo y decidiera quiénes iban a ser los trabajadores definitivos. Esas tres mujeres fueron seleccionadas de un listado que figura en el ayuntamiento con el nombre de todas aquellas personas que participaron en varios cursos de Gerocultor (la titulación requerida para trabajar en la Vivienda de Mayores) que se impartieron en Priego hace unos años. Quizá el hecho de que se hubieran celebrado estos cursos en el pueblo es el motivo por el que tanta gente se apuntó a la bolsa de empleo: una treintena de personas.
Y todas ellas llevan esperando desde noviembre de 2016 a que el Ayuntamiento les dé una respuesta. En apenas un mes se podría haber decidido qué tres personas de la bolsa de empleo reunían más cualidades y méritos para trabajar en la Vivienda de Mayores, sin embargo, han pasado siete meses y la Alcaldía todavía no ha resuelto esta situación, que es la que denuncia ahora Comisiones Obreras.